
Estos niños tienen entre 8 y 12 años, y todos arrastran un pasado, un mundo distinto. Necesitan unas cualidades básicas como son la elasticidad, la espontaneidad, máxima concentración, etc. Al principio eran 30 niños, y ahora sólo quedan 15. En parte esto se debe a una desmotivación, pero sobre todo porque algunos niños de los centros de acogida se metían con ellos simplemente porque bailaban ballet. Mucha gente piensa que son una cuadrilla de gente extraña, y que el ballet, más que de nenas, es de mariquitas. La gente no ha tenido educación para ello.

El mundo de la danza es difícil. Los bailarines tienen que renunciar a veces a muchas cosas, es una vida dedicada por completo.
Isabel Muñoz ha fotografiado a los bailarines de Ullate, los cuales se muestran al desnudo. Me parece una idea muy original, ya que se muestran a las personas tal y como son. El baile me parece que es como una forma de comunicarse, los bailarines pueden expresar con su cuerpo infinidad de sentimientos, de situaciones, sin necesidad del uso de las palabras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario